En los últimos años, Mark Zuckerberg ha experimentado una especie de «renacimiento» público. De ser criticado por su estilo robótico y por su manejo torpe de las controversias en Facebook, hoy se muestra como un entusiasta de las artes marciales mixtas (MMA) con una postura más abierta hacia la inteligencia artificial y una imagen más relajada. Para muchos, contra todo pronóstico, Zuckerberg se ha convertido en una figura más «cool».
Pero, según Naomi Gleit, actual jefa de producto de Meta y empleada número 29 de la compañía, Zuckerberg siempre lo fue en persona. Gleit, quien lleva 20 años trabajando a su lado, compartió una experiencia que resume la filosofía de vida del fundador de Meta.
Un Gesto que Dejó Huella
En 2014, Gleit atravesaba un momento personal difícil. Zuckerberg le propuso ser voluntaria junto a él en una clase extracurricular en East Palo Alto, donde enseñaban a estudiantes de secundaria a crear un negocio. La experiencia no solo marcó a los jóvenes, con quienes aún mantienen contacto, sino también a Gleit, que recuerda haber anotado las cuatro reglas que Zuckerberg escribió en el pizarrón ese día:
- Ámate a ti mismo.
- Solo así podrás servir verdaderamente a otros.
- Concéntrate en lo que puedes controlar.
- En esas cosas, nunca te rindas.
Incluso crearon pegatinas con las frases para que los estudiantes las recordaran. Para Gleit, estos principios «me han ayudado mucho con el tiempo».
Lecciones Simples con un Impacto Profundo
El primer consejo, «Ámate a ti mismo», puede sonar básico, pero es la base de la verdadera transformación personal. Como señala la investigadora Brené Brown, el cambio no nace de la autocrítica constante, sino de la autoaceptación. La autocompasión no solo impulsa tu desarrollo, sino que también te permite ayudar de forma genuina a los demás.
El tercer principio, «Concéntrate en lo que puedes controlar», recuerda a la conocida oración de la serenidad: no tiene sentido gastar energía en lo que no puedes cambiar. Sin embargo, Gleit admite que este es «probablemente el más difícil para mí».
Por último, la cuarta regla habla de voluntad y perseverancia. Zuckerberg es conocido por su determinación, y su propio recorrido —desde programar Facebook en un cuarto universitario hasta liderar una de las mayores empresas tecnológicas del mundo— es prueba de ello.
Amor + Enfoque + Perseverancia = Éxito
Estas reglas pueden parecer simples, pero como toda gran enseñanza, su valor está en su aplicabilidad. No solo sirven para estudiantes de secundaria: cualquier emprendedor, profesional o líder puede beneficiarse de ellas.
En un mundo lleno de distracciones y presiones externas, recordar estas cuatro frases puede ser un ancla para mantenerte enfocado, resiliente y conectado con lo que realmente importa. Porque al final, amarte, enfocarte y no rendirte no es solo un buen consejo para el colegio o la universidad… también es una estrategia de vida para triunfar en los negocios y más allá.
